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En el día de la Junta General Anual de Barrick Gold, comunidades en la República Dominicana reafirman su llamado para la reubicación

Diana Martin

Diana is one of MiningWatch's Co-Managers, with a wealth of international and domestic experience in work for social justice and peace.

El siguiente blog fue escrito por Diana Martin de MiningWatch Canada y María Alejandra Torres García de Earthworks.

La Junta General Anual de Accionistas (AGM, por sus siglas en inglés) de Barrick Gold vuelve a ser virtual este año. Tras la AGM del año pasado, la empresa anunció que “seguiría celebrando juntas generales anuales de forma virtual, a pesar de los llamamientos para que las empresas públicas volvieran al formato presencial.” A pesar de esta decisión, el Comité Nuevo Renacer en la República Dominicana – que representa a 450 familias que viven aguas abajo de la mina Pueblo Viejo y de la instalación de almacenamiento de relaves El Llagal – le recuerda Barrick y a sus accionistas que su lucha por la reubicación continúa.

En 2023, el Comité participó en una Semana de Acción Global, exigiendo al  gobierno que detuviera el proyecto de expansión de Pueblo Viejo y reubicará a las comunidades afectadas. En 2024, el Comité reiteró estas demandas en un vídeo que se proyectó en una valla publicitaria móvil aparcada frente a la sede de Barrick en Toronto durante la AGM.

Ahora, en 2025, el Comité considera que su petición de reubicación ha alcanzado un nuevo nivel de urgencia. Informan que los empleados de Barrick les han comunicado que la empresa aumentará la altura de la presa de colas de El Llagal en otros 14 metros. La presa, que retiene los residuos de la mina, ya tiene más de 135,5 metros de altura y almacena 100,1 Mm³ de relaves a la fecha de junio de 2023. La empresa prevé que la presa alcance una altura de 152 metros. El Mapa de Google muestra que algunas casas se encuentran a menos de 500 metros del pie de la presa. En otras jurisdicciones, como Ecuador y el estado de Minas Gerais en Brasil, normativas prohíben la construcción de presas de colas cuando hay viviendas tan cerca, dadas las dificultades de evacuación en caso de rotura de la presa.

El Comité también ha planteado serias preocupaciones sobre los planes de Barrick de construir una segunda instalación de almacenamiento de relaves, “El Naranjo,” que se ubicaría a seis kilómetros al sureste de la planta y cerca de la presa existente de El Llagal. Según la revisión independiente realizada en 2023 por el Dr. Steven Emerman del estudio de impacto ambiental de Barrick para la ampliación propuesta. El Naranjo sería “una de las presas de escollera con núcleo de tierra más grandes del mundo,” con una altura de 157 metros. Barrick impugnó partes del análisis del Dr. Emerman, pero no negó su caracterización del tamaño de la presa. Los mismos documentos de Barrick señalan que las previstas de la rotura de una presa identificadas por Barrick tanto en El Llagal como en El Naranjo han sido calificadas como “extrema,” lo que significa que se podrían “esperar más de 100 víctimas mortales en caso de rotura de la presa.”

Dada la posibilidad de que se produzcan consecuencias extremas en ambos casos si las presas fallan, el Comité ha estado apoyando a seis comunidades que corren el riesgo de ser desplazadas por la presa de colas de El Naranjo. Estas comunidades alegan que no han llegado a un acuerdo con Barrick sobre una reubicación adecuada y una compensación justa por sus cultivos. Mientras continúan las negociaciones, a partir de abril de 2025, los miembros de la comunidad están tratando activamente de impedir que los empleados de Barrick–acompañados por soldados–talen árboles en la cabecera del río El Naranjo, una parte vital del ecosistema local. Como informa Listin Diario, “[l]os residents de la zona han formado un frente común contra la tala indiscriminada que, según argumentan, no solo pone en peligro su medio ambiente, sino también sus medios de subsistencia.” Como también informa Listin Diario, el departamento de Medioambiente de Barrick explica que Barrick está talando árboles para construir “un camino en terrenos de su propiedad…para el paso de vehículos sobre el arroyo, sin afectar la calidad de las aguas.”

Mientras Barrick Gold se reúne virtualmente hoy con sus accionistas, el Comité y las numerosas comunidades a las que representa y apoya están formando un gran piquete frente de la oficina de Barrick en Santo Domingo en defensa del agua, contra la construcción de la carretera y por la salvación del Río Naranjo. Reiteran a Barrick Gold y a sus accionistas que no quieren formar parte de las “más de 100 víctimas mortales” previstas en caso de rotura de la presa. Piden urgentemente su reubicación antes de que se desencadene una tragedia.